Alberto Romero, secretario general de AEIM: “Hoy los ecologistas son pro-madera”
Martes, 28 de diciembre de 2010.
AEIM es la Asociación Española del Comercio e Industria de la Madera.
En los últimos dos años, esta prestigiosa organización ha experimentado
un cambio de orientación de sus estatutos y de su propia denominación
Hoy más del 80% de la madera consumida en España proviene de la Unión Europea; el resto es importación pura de África, América y el Sudeste Asiático.
"Al verificar que la mayor parte de las adquisiciones de madera no son ya jurídicamente importaciones, y para ampliar la base de asociados a empresas industriales, decidimos cambiar el nombre de Importadores por el de Comercio e Industria; manteniendo nuestras siglas, que son conocidas en el sector -explica Alberto Romero, secretario general de la Asociación desde hace veinte años-; los motores de búsqueda en nuestro sitio web desvelan que casi todos nuestros visitantes nos conocen a través de la marca AEIM."
Habitualmente se ha acusado a AEIM de defender la materia prima y a los proveedores del exterior...
Los almacenes asociados a AEIM ofrecen todo tipo de maderas, incluidas las nacionales. Y sus clientes son industriales españoles. Nosotros promovemos el uso de la madera en general, y defendemos los intereses de los almacenistas, independientemente de la procedencia de la madera.
¿Cuál es el perfil vigente del almacén de madera en España?
Es básicamente una empresa familiar. La mayor parte son dirigidos por la segunda generación, algunos por la tercera... una auténtica prueba de fuego. Quedan pocos especializados en madera maciza; han evolucionado hacia la oferta de productos derivados: tableros, suelos, puertas, molduras, vigas..., aderezado con un servicio de transformación de la madera (corte, canteado, tratamiento, transporte). Algunos han montado una show-room dedicada al cliente final, aunque la mayoría sigue apostando por el cliente profesional como su referencia.
¿Cuál es el peso actual del agente comercial de maderas en AEIM?
La figura del agente sigue siendo fundamental para que el almacenista pueda acceder realmente a los productos que necesita. Ya son considerados (aquellos que así lo deciden) miembros de pleno derecho en la Asociación, igual que los propios almacenistas. Cumplen una labor muy importante, no tanto en productos elaborados como en madera en rollo y aserrada. Conocen las necesidades del almacén, y se desenvuelven mejor a la hora de realizar trámites o manejar idiomas distintos al español.
¿Cómo está afectando la crisis, tanto a la Asociación como a los Asociados?
Nuestro sector es dependiente de la construcción, para bien y para mal. En los años de bonanza registramos consumos de madera enormes; desde 2008 pagamos esos excesos y en 2010 ha persistido un estancamiento, que parece ser continuará en 2011. La crisis está afectando muy duramente a las empresas, tanto en el comercio como en la industria de la madera, con especial virulencia hacia los segundos, porque las caídas de ventas son muy pronunciadas y sus estructuras empresariales a duras penas han podido reaccionar ante el nuevo escenario.
¿Cómo ha evolucionado el comercio exterior español de madera y derivados en 2010?
La importación de coníferas nórdicas ha experimentado un ligero repunte durante el primer semestre, aunque esto podría responder más a un ajuste coyuntural de stocks que a un incremento de la demanda. Parece que los almacenes se han limitado a regular existencias. En frondosas y tropicales continúa la caída del consumo. Y los productos elaborados como chapa, tablero y madera estructural se han mantenido. Veremos qué cifras arroja el segundo semestre, antes llegar a una conclusión global sobre este ejercicio.
¿Cuál es la posición de AEIM respecto al uso de la madera como biomasa para generar energía?
La biomasa contribuye a una mayor valorización de la madera y, por tanto, a fortalecer el sector forestal. La naturaleza es sabia, y el bosque nos ofrece madera de varias calidades para mueble, carpintería, construcción, transporte y manutención, pero también otros productos derivados de los aprovechamientos forestales; subproductos, restos o desperdicios, que sirven para hacer tableros y para generar energía, que sin duda van a ser protagonistas en el comercio e industria de la madera del siglo XXI.
¿Cómo es la relación actual entre AEIM y las organizaciones ecologistas?
Diálogo y colaboración avanzan entre almacenes y conservacionistas. Parece increíble el progreso que se ha producido en apenas cinco años. Están muy lejos aquellos años del boicot a la madera. Hoy los ecologistas son pro-madera. Afirman abiertamente que la madera, como material de construcción y decoración, es preferible a otros materiales.
AEIM, por su parte, también ha progresado. Teníamos pendiente garantizar la procedencia y sostenibilidad del recurso. En 2005 acatamos e hicimos público un código de buenas prácticas, en consonancia con otros países europeos. Muchas empresas han certificado su cadena de custodia con ambos sistemas. Y a partir de 2013 será obligatorio garantizar la legalidad de toda la madera que entre en la Unión Europea. Aprobada esta asignatura, podremos ir de la mano de los conservacionistas sin ningún complejo para promocionar la madera. WWF ya ha difundido que sería deseable reactivar el sector de la rehabilitación, con sistemas y materiales ecológicos, para mitigar el cambio climático, mejorando el aislamiento y reduciendo las emisiones de CO2.
AEIM también ha trabajado mucho por acercar la madera a la figura del arquitecto...
Tenemos muy claro que a la hora de promocionar la madera, es esencial incidir en las personas que están tomando las decisiones en los proyectos: los arquitectos y aparejadores, interioristas y decoradores, entre otros profesionales. Es una tarea complicada, porque la madera está ausente en sus planes de estudio. Persisten ciertas ideas preconcebidas, y prejuicios sobre algunas especies en particular.
Por todo ello, y de la mano de otras asociaciones del sector, llevamos años desarrollando una divulgación general enfocada a mostrar al arquitecto qué cosas se pueden hacer con madera. También participamos en proyectos con un enfoque más técnico, como "Construir con Madera", desde donde se viene realizando una labor espléndida, cuyo paradigma es la edición de guías técnicas, elaboradas en coordinación con el Instituto Eduardo Torroja, para dar al arquitecto una serie de directrices a la hora de proyectar con madera.
¿Cuáles han sido las acciones más recientes de marketing y promoción de la madera llevadas a cabo por AEIM?
La prioridad era tener a nuestro lado a los grupos conservacionistas, antes de iniciar ninguna acción concreta de promoción. Ellos tienen mucha credibilidad, aceptación social e influencia mediática. Una vez acercadas posturas y encontrados los puntos de encuentro, emprendemos las primeras acciones: el año pasado alcanzamos un acuerdo para fomentar la certificación FSC en la cuenca del Congo, y hace pocas semanas Félix Romero, responsable del área de Bosques de WWF Adena, participó en Construtec en unas jornadas técnicas sobre construcción sostenible organizadas por AEIM, junto con otras asociaciones del sector.
¿Qué proyectos acometerá AEIM a corto y medio plazo?
Editadas en 2009 sendas guías de compra pública y privada de madera sostenible, venimos presentándolas en ayuntamientos y entidades locales de la Administración, ofreciendo unas directrices sobre cómo acometer una compra responsable de productos de madera. Queremos continuar con esta labor, que pretende influir positivamente en las administraciones para que los pliegos de condiciones de las normas que afectan a la compra de madera sean realistas y respondan a lo que se viene haciendo en otros países con mayor experiencia en la materia.
En cuanto a promoción pura de la madera, todo el sector y también AEIM tenemos el gran reto de comunicar a la sociedad que el consumo de madera incide en la buena gestión de los bosques. Apenas el diez por ciento de la gente conoce los sellos de certificación, y más de un ochenta sigue pensando que el consumo de madera incide negativamente en los bosques, mientras la realidad desvela que la superficie forestal está creciendo en la Unión Europea, y también en España.
¿Algo que reprochar a la Administración en cuanto a las leyes aprobadas recientemente en materia laboral, medioambiental o fiscal?
Padecemos una Administración que está multiplicada y pesan sobre los empresarios muchas trabas burocráticas. Nuestras empresas dedican un 20% de su tiempo a rellenar y tramitar papeleos. Asimismo, es deseable un marco normativo realista y común en todo el territorio nacional, sin discriminaciones y respetando la libertad de competencia. No pedimos subvenciones ni ayudas; simplemente que no se pongan trabas innecesarias. Ya tratará el empresario de crear riqueza y trabajo.
Coincidimos con el resto del sector en que la rehabilitación es la gran esperanza del sector, ya que las perspectivas en la iniciación de vivienda son muy negativas.
¿Serán capaces los almacenistas de madera de cumplir y hacer cumplir la ley de morosidad?
Desde la Asociación estamos incidiendo en que se cumplan escrupulosamente los plazos de pago establecidos en la ley. Es un avance importante, particularmente frente a los abusos de algunas empresas constructoras. El mensaje va calando, y creemos que los Asociados y sus clientes salvarán las lógicas reticencias iniciales a cambiar los hábitos de pago.
Para concluir, imaginamos que tras veinte años dirigiendo AEIM, es Vd. un enamorado de la madera...
La madera tiene futuro. Es natural, renovable, reciclable, precisa muy poca energía para su elaboración, no emite CO2 y, además, lo captura. La madera es el material ecológico por excelencia.